Como si hubieran estado siempre ahí —aguardando ser descubiertas— estas trece canciones aparecen envueltas en la voz de Carla Cecche y la guitarra de Mariano Botto con la delicadeza de quien abre una carta escrita a mano. Parece, el tercer disco del Dúo El Balcón, no llega para romper nada, sino para dejar que algo brote: una raíz que vibra en lo íntimo y en lo colectivo, en lo local y lo universal.
Grabado entre mates y silencios largos en El Establo, allá por abril de 2021, este álbum es un pequeño mapa sensible que recorre la vidala, la chaya, la milonga, la llanera venezolana y la canción sin apuro de etiquetas. Conviven composiciones propias de Mariano con versiones que dialogan con nuestros oídos ya poblados de historia: Construcción de Chico Buarque, Cardo o ceniza de Chabuca, Águila de trueno de Spinetta. Y todo suena con el pulso propio de quien se permite habitar lo que canta.
En algunos temas intervienen Diego Gosiker en percusión y de Ricardo Capria en contrabajo aportando profundidad y textura a ese sonido de madera y aire que recorre el disco entero. También se suma Emilio Hernández con algunos accesorios.
Producido por ellos mismos, como debe ser cuando el fuego es propio, Parece es un testimonio de lo que ocurre cuando se camina con las canciones en la mochila, y al cantarlas encuentran su forma verdadera. Y así, como dicen en la presentación, estas canciones atravesaron ríos, ciudades, mares y montañas… y ahora, reunidas, habitarán nuevos rincones
