«Apartes» es un disco que nos invita a compartir la intimidad de un proceso creativo sin reglas, como quien deja pequeños apuntes sobre una mesa esperando ser descubiertos. Julián Venegas nos regala un trabajo que no pretende contar una sola historia, sino muchas pequeñas. No hay un concepto rígido ni una línea a seguir, pero cada canción parece encontrar su lugar con una naturalidad que emociona.
Lo maravilloso de este disco es la sensación de cercanía que transmite. Venegas toca su guitarra, graba una percusión mínima, invita a amigos a sumarse en momentos precisos, y todo se siente como estar en el living de su casa, compartiendo músicas sin prisas. Las voces de Julia Pistono y Maia López se entrelazan con la suya, mientras que el piano de Alejandro Bluhn o el charango de Damián Verdún añaden pinceladas sutiles que completan la escena.
«Apartes» es también un encuentro con otros, donde Julián Venegas abre la puerta a colaboraciones que enriquecen su universo sonoro. Las canciones llevan la firma de complicidades profundas: en coautoría con Tomás Boasso, Adrián Abonizio, Severo Callaci y Sandra Corizzo. A esto se suman versiones cuidadas y emotivas de autores tan diversos como Pitufo Lombardo, Pica Juárez y el Indio Solari. Cada uno de ellos deja su huella, pero es Venegas quien, con su sensibilidad y voz, los une en un todo que vibra y respira de manera personal.
Escuchar «Apartes» es dejarse llevar por el juego entre géneros y estilos. El Chula nos vuelve a cautivar, y aunque nunca sepamos por dónde va a ir, siempre sabemos que vale la pena.
