Lo inesperado no fue planeado. Llegó como llegan las cosas verdaderas: sin permiso, pero con todo el peso de lo necesario. Es el primer disco de Lore Browarnik, psicóloga, madre, actriz y bailarina, que encontró en la canción un modo de decir lo que no sabía cómo decirse. Desde Martínez, en el conurbano norte, Lore viene cultivando una sensibilidad singular que ahora florece en nueve canciones propias atravesadas por el deseo, el duelo, la maternidad, el cuerpo, la infancia y ese vértigo íntimo de estar vivas.
La producción artística estuvo a cargo de Julián Mourin y Luca Laurito, y el disco cuenta con colaboraciones de enorme belleza: Marcelo Moguilevsky en flautas, Cecilia Gauna en voces, Marcela Pedretti en piano. Cada canción fue ilustrada con una acuarela de Mariana Zúñiga, sumando una capa visual a la delicadeza sonora del disco.
La instrumentación —guitarras, piano, flautas, clarinete, cello, percusiones— está al servicio de la canción, sin sobrecargas, dejando respirar la emoción. Lorena no canta para mostrar, canta para compartir. Como ella misma dice: “Lo inesperado es mi voz cuando no sabía que quería cantar”. Hay honestidad en ese decir, y también una apuesta poética: permitir que lo simple diga mucho, y que lo cotidiano se vuelva materia de belleza.
