AmbulantesCanciones que llegan como una crónica de lo cotidiano, con la sencillez de lo que camina a nuestro lado todos los días. Módico y de calidad, el nuevo trabajo del dúo Ambulantes (Julián Venegas y José Santucho), abre esa puerta: la de los oficios urbanos, los vendedores ambulantes, los pregones que llenan veredas, plazas y colectivos, y que forman parte de nuestra memoria cultural.
El proyecto parte de una idea simple y potente: nombrar lo que a veces queda invisible. “La escoba hace que el que la vende se llame ‘escobero’”, dice Venegas, recordándonos que el objeto crea la identidad, y que detrás de cada oficio hay una historia, un cuerpo y una voz. El disco convierte esa mirada en canciones: retratos sonoros que dignifican y devuelven humanidad a esos trabajos que suelen pasar desapercibidos en la vorágine urbana.
Con guitarra, voz y percusión, los Ambulantes eligen un formato austero, pero profundamente expresivo. Ese minimalismo no es carencia: es estética y decisión política. En tiempos donde la saturación sonora parece norma, Módico y de calidad invita a detenerse, a escuchar lo pequeño, lo modesto, lo íntimo. Como una especie de espejo de lo ambulante: música que se desplaza ligera, sin alardes, pero que deja huella.
La propuesta rescata una poética del trabajo que atraviesa todo el cancionero popular argentino, desde Yupanqui hasta Carnota, pero con un gesto nuevo: el de mirar hacia los oficios más modestos, esos que sostienen la vida cotidiana.
Módico y de calidad no es solo un homenaje a los trabajadores ambulantes: es también una declaración sobre lo que entendemos por arte popular. Canciones que son memoria y presente, canto y resistencia, poesía y denuncia, pero también ternura y celebración de lo humano. Un disco que suena como esas voces que llenan el aire de la ciudad: cercanas, entrañables, imprescindibles.
